Expocómic 2007: El salón internacional del tebeo de Madrid

El pabellón de convenciones de la Casa de Campo abrió ayer sus puertas a la décima edición de Expocómic, el salón internacional del tebeo de Madrid. Estará abierto desde ayer, jueves 29 de Noviembre hasta el 2 de Diciembre.
En la web oficial tenéis los detalles de los autores que irán a firmar, y los diferentes actos que se pueden ir a ver o en los que participar. Yo simplemente comentaré cómo ha sido mi visita y las cosas que me han llamado más la atención de esta nueva edición del salón del cómic.

Nada más llegar había que pagar 5€ en la taquilla (12€ por el abono de los cuatro días), y al atravesar la puerta te daban una bolsa con un ejemplar de la revista MAD (no un cómic, como anunciaban en los carteles).

Los stands de Comics

Dentro del pabellón un montón de tiendas mostraban en sus stands sus mejores productos, algunos de ellos ligados a suculentas ofertas. Había que mirar bien antes de comprar, y sobre todo comparar el precio en distintas tiendas. He visto productos con más de 30€ de diferencia en el precio entre dos tiendas que tenían los stands pegados.
Había sitio para cómics clásicos, donde se podían conseguir las primeras ediciones de algunas series, cómic americano y sobre todo manga. El merchandising estrella como cabía esperar era el de las series de moda como Naruto, Death Note o Caballeros del Zodiaco, que tenían siempre un lugar en la mayoría de los stands.

La Guerra de las Galaxias también tenía una gran representación. Se vendían figuras, sables de luz, tazas, chapas, camisetas, robots de R2D2 y un montón más de utensilios traídos de una galaxia lejana, muy lejana. Incluso había stands dedicados exclusivamente a los productos de esta Saga interplanetaria.

Otros Stands

No solo de cómics vive el hombre, en el recorrido por el Expocómic tuvimos el placer de descubrir algunos stands más relacionados con el mundo geek o de los videojuegos que con el séptimo arte. Uno de estos stands era Fan Fantasy, que se dedicaban a réplicas de gadgets y armas de videojuegos como el escudo de Link, y a hacer algunas ilustraciones como la de Lara Croft, todas por encargo.

También tenía un rincón la comida japonesa y algún que otro producto traído del país del sol. Una buena ocasión para probar ramen, sushi o golosinas niponas.

La Comunidad de Madrid puso a disposición de los visitantes una biblioteca de cómics, con unas mesas para leer ejemplares y decorado con un muñeco a tamaño real de Spiderman sentado en una silla que daba miedo.

Exposición de cómics y venta de originales

En el piso de arriba del pabellón, estaban colgadas ilustraciones originales de cómics en la pared.

En el centro de esta muestra de viñetas había un stand donde se podían adquirir páginas de cómics originales. Personalmente soy de los que pienso que el original de un cómic es el producto una vez editado, no las viñetas anteriores al producto final.

Merchandising de Videojuegos

Como no, los videojuegos también tenían su sitio, o por lo menos el merchandising relacionado con ellos. Relojes y colgantes de Final Fantasy, muñecos de Capcom, y sobre todo productos de Mario Bros. Uno de los productos que más me llamó la atención es el de una bolsa para las botellas de agua de Mario, que se podía adquirir por 6€ en el stand de comida japonesa Tokio-Ya.

Mis compras

Siempre que voy a un sitio de estos acabo comprando un montón de cosas aunque no tuviera pensado comprarlas, pero uno es débil…

– Una figura de Duke Nukem: Me costó solo 4€ y había a la venta otras de sus enemigos como el cerdo policía al mismo precio.

– Una figura de Ken: Estaba a mitad de precio, 9€ en total y eso que a las tiendas se las venden por 12€ (o eso decía el vendedor del stand, que me lo repitió hasta 6 veces diciendo que era una oportunidad única).

– Una revista Maverick: Esta revista habla de videojuegos, cine y cosas frikis en general. Además si la comprabas tenías la posibilidad de hacer un friki test y conseguir un premio. Las preguntas eran bastante complicadas y yo no tengo mucha idea de datos de cine, pero quién lo iba a decir, al final fallé en una de videojuegos sobre el Silent Hill. También regalaban unas pegatinas de freeki, su web.

– Una baraja de Poker del Puño de la Estrella del Norte: Me costó 3€ y me la compré por que es mi manga favorito. Una pena que Planeta de Agostini sólo pusiese a la venta los 15 primeros tomos y cortase ahí la serie con respecto a los 30 originales que salieron en japón.

– Unos caramelos blandos japoneses: Eran de limón y estaban riquísimos, muy parecidos a los sugus.