La operación bikini de las consolas

Cada verano nos disponemos a lucir palmito a lo largo y ancho de nuestra geografía en playas y piscinas, nos desnudamos y nos exhibimos sin ton ni son intentando acaparar sol y alguna miradita furtiva. Para sentirnos bien con nosotros mismos nos sacrificamos durante meses para llegar al verano con una figura esbelta y atractiva. Hacemos ejercicio, nos recatamos con la comida, dejamos el tabaco y en definitiva llevamos una vida saludable con vistas a la llegada de la época estival.

Aunque el verano esté dando sus últimos coletazos a nadie se le escapa este fenómeno que desde hace años llamamos Operación Bikini, algo que parece exclusivo de las personas, pero no. Parece que a las consolas también les va el rollo de fardar de físico, que no solo luchan por ser las más potentes o las mas avanzadas, si no que además también quieren ser las más delgadas y las menos pesadas; y si no que se lo pregunten a la nueva Playstation 3 Slim, que ha pasado a adelgazar un 32% con respecto a su antecesora. Eso en cuanto a tamaño, porque en cuanto a peso la cifra es de un 36%. No está mal verdad.

El camino que ha seguido esta consola para “perder unos kilos” parece algo relativamente novedoso, en la que la propia Sony parece la pionera desde que empezara a hacer lo mismo con la PSOne, pero la verdad es que este método de adelgazamiento es algo que viene de muy atrás. Veámoslo.

Atari 2600 Jr

Los adelantos tecnológicos y el abaratamiento de los costes de producción, aunados al énfasis de las compañías porque sus productos no sean un electrodoméstico más que ocupa espacio en casa, desembocan en este tipo lanzamientos, en el que la consola se revaloriza gracias a esta estratagema mercantil fruto del más recalcitrante marketing.

Esto es lo que llevó en su día a Atari a crear una segunda versión de su Atari 2600. En realidad Atari realizó distintas variantes de su consola emblema pero este modelo, el 2000 (1982), fue el que más relevancia obtuvo. Conocida como Atari 2600 Jr llegó a Europa a mediados de los años 80.

Era una consola más liviana y con un rediseño más moderno que obtuvo un gran éxito y fue clonada hasta la extenuación.

Master System II

Una encarnizada batalla entre Sega y Nintendo impulsó a la primera a hacerle unos arreglos a Master System (1985), esculpiendo lo que sería la Master System II. Una consola más enfocada al mercado europeo, con formas más redondeadas y elegantes, que se inspiró en su diseño en una consola más antigua de Sega, la SG-1000, una máquina que no llegó a salir de Japón. La Master System II era una consola más pequeña y ligera que su antecesora en cuyo interior se albergaba el juego Alex Kidd in Miracle World.

Pero carecía de otras lindezas que si poseía la primera Master System, tales como el botón de reset, el bus de expansión o el slot de tarjeta que se utilizaba para algunos juegos. Además se rediseñó el pad y se eliminó el botón de start, que pasaba a estar en la consola, cosa que no resultaba muy cómoda, ya que tenías que levantarte cada vez que querías pausar el juego. Y todo para rebajar costes.

La consola llegó a tener mucho éxito en Europa y en otros sitios como Basil, donde la compañía que se encargaba de distribuirla en ese país, Tectoy, llegó a lanzar una tercera versión con 131 juegos pregrabados en la memoria.

Megadrive II

Otro producto de Sega, que sucedió a su antecesora en 1993, año que vio la luz en Japón. Al igual que pasó con Master System II, la Megadrive fue a una clínica de adelgazamiento y perdió peso y volumen. Además le hicieron un liftin y le dieron un buen lavado de cara eliminando algún botón de la carcasa como el control de volumen.

También tuvo su tercera versión de manos de Tectoy en tierras sudamericanas, que incluía 81 juegos en memoria, casi nada.

Pero la cosa no queda ahí, parece que el negocio le va bastante bien a Tectoy, ya que recientemente habréis podido ver en este mismo blog la cuarta versión de Mega Drive con 87 juegos preinstalados en memoria, pero con un reclamo mucho más poderoso, la inclusión del juego Guitar Idol, toda una adaptación de Guitar Heroe para una renovada consola de 16 bits, por supuesto con su pertinente guitarra a cuestas.

NES 2 / AV Famicom

Nintendo no iba a ser menos que Sega y le aplicó el bisturí de forma radical a Nes con Nes 2, como fue conocida en América; o AV Famicom en Japón (1993). Con una remodelación de la carcasa bastante estrambótica, y unos pequeños ajustes en el hardware que perfeccionaban una consola que se había convertido en todo un mito. Puede que a alguno de vosotros esta consola os pille un poco descolocados, y es que Nes 2 nunca llegó a pisar Europa, y más teniendo en cuenta que en Europa aterrizó más tarde que en Japón y Estados Unidos, lógicamente.

Por aquel entonces Super Nintendo ya deambulaba por el mercado a sus anchas y eso influyó en la nueva Nes, que vio como su nuevo mando adquirió un look propio del Cerebro de la Bestia.

Super Nintendo 2 / Super NES Jr

Como ya he dicho antes, cuando salió a la venta la segunda parte de Nes, Super Nintendo estaba en pleno apogeo, que hacía poco que había llegado al mercado. Pero años más tarde la consola fue perdiendo gas, como es normal, y para insuflarle algo más de vida, Nintendo se decantó por contratarle un asesor de imagen personal, cuyos resultados desembocaron en Super Nintendo 2, también conocida como Super Nes Jr. Una máquina que no aportaba apenas ninguna novedad técnica, salvo alguna restructuración estética, menor peso, tamaño y una reducción en el precio.

La consola solo pisó tierras japonesas y americanas, ya que el diseño europeo de Super Nintendo que todos conocemos era más elegante y proporcionado.

Puede que alguno de vosotros hayáis conseguido una versión pal de esta segunda interpretación de Super Nes, pero siento deciros que simplemente se trata de una excelente falsificación, una clónica que deambula por el mercado impunemente. Una obra de artesanía digital que ha engañado a mucha gente.

Hoy en día la Super Nes 2 es un objeto de coleccionista de los más valorados dentro del mundo de los videojuegos.

Game Boy Pocket / Game Boy Light

Nintendo, que era muy cuca, quería tener las videoconsolas más guapas y bellas del mercado, y a qué consola poner a dieta mejor que Game Boy, nada mejor que adelgazar a una consola portátil, desde luego lo más lógico.

La verdad es que la antigua Game Boy era un ladrillo de proporciones considerables y además poseía una pantalla verde que nos ponía en más de un aprieto para poder verla en condiciones.

Y en 1996 Nintendo nos brindó la oportunidad de disfrutar de Game Boy Pocket, una consola mucho más pequeña y manejable, con un aspecto muy similar a la anterior y con un gasto de energía menos incisivo, solo se necesitaban 2 pilas AAA para que funcionase. Eso sin hablar de la pantalla, con una mejor definición y con cuatro tonos de grises. Eso si, aun sin luz. Todavía necesitaríamos una fuente de luz externa para ver con garantías la pantalla.

Para ver una Game Boy retroiluminada cuya pantalla desprendiese su propia luz Nintendo salió del apuro con Game Boy Light, con una luz verdosa muy peculiar. Pero había un pequeño problema, esta consola solo fue lanzada en Japón.
Poco después aterrizaría Game Boy Color, pero dada sus características se podría considerar como una consola nueva, más que una remodelación del modelo predecesor.

Game Boy Advance SP / Game Boy Micro

Tuvimos que esperar hasta 2003 para poder ver una Game Boy con luz interna por estas tierras. Era la consola portátil Game Boy Advance SP, que mejoraba sensiblemente a su progenitora, Game Boy Advance. A parte de tener una pantalla retroiluminada, el tamaño de la consola era menor, el cirujano hizo maravillas y la convirtió en una portátil plegable, al estilo concha, toda una antecesora de la futura DS, de la que hablaré más tarde.

Además se cambió totalmente el sistema de autonomía energético, se desterró para siempre a la inefable pila en pos de una batería recargable de ion-litio. Posteriormente se cambió la luz interna de la pantalla por una retroiluminada que mejoraba ostensiblemente la calidad de ésta.

Nintendo, que es muy exigente, no se conformó con los retoques que le hizo a Game Boy Advance en su versión SP, así que la mandó al gimnasio y la moldeó hasta conseguir lo imposible, una consola portátil minúscula. Y así, en 2005 puso en la calle la versión definitiva de Game Boy, la Game Boy Micro, una consola que mejoraba las capacidades técnicas de SP con un tamaño ínfimo y una pantalla retroiluminada superior de 2 pulgadas, con un peso de 80 gramos y unas medidas ridículas de 50 x 101 x 17,2 milímetros.

Aunque todas estas virtudes tenían un pequeño pero: solo era compatible con los juegos de Game Boy Advance, dejando por el camino la retrocompatibilidad con los antiguos juegos de Game Boy y Game Boy Color.

Esta pequeña consola era tan coqueta, que no se conformaba con tener la mejor figura, sino que además estaba provista de un buen fondo de armario, ya que había disponible para ella una serie de diferentes carcasas intercambiables de diferentes colores y temáticas.

Nintendo DS

Nintendo decidió poner fin a la franquicia Game Boy en su siguiente generación de portátiles, algo que me extrañó mucho teniendo en cuenta lo que significa este nombre en el mundo de los videojuegos. Nintendo lo explica porque pensaba que con Nintendo DS se creaba una tercera vía, y no una sucesora de Game Boy, sino una alternativa. Aunque el tiempo le quitó la razón, ya que Nintendo dejó de programar para GameBoy antes de lo pensado.

Y tras un tiempo en el mercado DS pasó por el quirófano para hacerse los típicos arreglos, unos gramos menos por allá, una ampliación de pantalla por acá, un alargamiento en el tiempo de duración de la batería y obtenemos como resultado una renovada y elegante DS Lite. Una consola muy cool de diversos colores.

Ds Lite apareció en 2007 con una suculenta bajada de peso, un 21% menos, y de tamaño, 42%. Estos eran los cambios más significativos de la consola, que se hacían aun más portátil. Eso sin contar la disposición de alguno de los botones de la máquina, que cambiaban de lugar, como start o select.

Nintendo DSi

La reciente DSi más que reducir el tamaño fue a la universidad y adquirió nuevas aptitudes, como leer tarjetas sd, reproducir música, mejorar su capacidad wifi, o hacer fotos, con una nueva cámara que podría dar mucho juego en cuanto a realidad aumentada se refiere.

En cuanto al físico no hubo mucha novedad, una silueta muy similar a su precursora, con un leve aumento de la pantalla y demás mejoras habituales de peso y tamaño. Cabe destacar que la piel de esta nueva consola se volvió algo más áspera para propiciar un mejor agarre, con una textura de goma color mate que recuerda a la parte trasera de algunos móviles.

Y de nuevo nos encontrábamos con un pequeño inconveniente, para que la consola fuese algo más estrecha se tuvo que optar por prescindir de la ranura para juegos de Game Boy Advance. Toda una barrera para los más nostálgicos.

PSOne

La compañía con la que rompió relaciones Sony, como más de uno sabrá, era Nintendo, que se alió con ésta para instaurar una nueva consola con CD como soporte. Distintas divergencias entre ambas compañías propiciaron que Sony iniciase una andadura en solitario tan prolífica que aún hoy hace que más de uno en Nintendo se esté tirando de los pelos.

Y de esta forma en el año 2000, Sony convirtió la “tabla de planchar” de Playstation en una atractiva consola de curvas sinuosas y proporciones sutiles con Playstation One, más conocida como PSOne. Se eliminó el botón de reset de la consola, se mejoró el lector de CD´s, se suprimió alguna ranura para ports, y demás modificaciones básicas para una consola que se presentaba como una alternativa económica a Playstation 2, que apareció el mismo año.

PlayStation 2 Slim

La consola más vendida de la historia contrató un entrenador personal y se machacó en el gimnasio hasta convertirse en PS2 Slim (2004). La nueva consola de Sony hacía verdadero honor a su nombre, puesto que era un 32% más pequeña que su hermana mayor. Una de sus más importantes novedades era la aparición en escena de un puerto Ethernet, que la hacía más dicharachera y extrovertida, ya que facilitaba su conexión a Internet, algo muy demandado por el público.

En esta ocasión la consola apenas cambiaba el diseño, era casi igual que la anterior salvando el adelanto que supuso su considerable reducción. Esta disminución de volumen trajo consigo ciertas consecuencias, tales como la desaparición de la bahía de expansión de 3.5 pulgadas, con la consecuente ausencia de del disco duro interno, algo que acarreó algún problema a algunos juegos que lo necesitaban, ya que la opción alternativa a ésta era utilizar un disco duro externo mediante sus nuevos puertos USB 1.1, que resultaban algo lentos.

Se le hizo una buena liposucción, y se le extirpó la fuente de alimentación, que pasaría a ser externa. Y aunque en un principio dio algún problemilla con la compatibilidad con juegos de PSX, posteriormente se subsanaron estas nimias carencias con posteriores versiones.

PSP Go

Si hay una consola que se ha modernizado hasta la saciedad, de forma reiterada y continuada esa es sin duda la Playstation Portable de Sony. Una consola portátil que ha sufrido diversidad de adaptaciones y versiones, con cantidades ingentes de nuevo firmware. Como una de las más importantes, la versión PSP 2000 (2007), también conocida como Slim & Lite. Que perdía peso en un 33%, y reducía su figura en un 19%, un trabajo duro para Sony, que introducía tal potencia (recordemos que PSP es una consola portátil de 128 bits) en un “aparatejo” tan pequeño.

Más tarde llegaría la versión 3000 (2008). Por aquel entonces PSP andaba un poco perezosa, y los nuevos avances fueron más bien escasos. Solo destacaban la aparición en escena de una nueva pantalla LCD de gran calidad y un nuevo micrófono.

Pero hace bien poquito llegó la revolución, tras numerosos rumores y habladurías se presentó el nuevo aspecto de PSP, la nueva PSP Go. Nunca una PSP había sido tan chic, con una pantalla deslizante que escondía los nuevos botones de mando, con una considerable reducción de volumen, y sobretodo con la desaparición del lector de discos UMD, ahora los juegos se almacenaban en una memoria interna de 16 Gb. Y además podrás tranferir tus datos mediante Bluetooth.

 

Y con esto llegamos al final. Está claro que una reducción de tamaño en la consola es algo más útil en una portátil que en una de sobremesa, pero las compañías se las tienen que ingeniar para vender. Así que tras el reciente lanzamiento de PS3 Slim no penséis que será el final, estamos destinados a ver diferentes versiones de una misma consola una y otra vez. Solo es cuestión de tiempo. Así que… ¿Cuál será la próxima consola en ponerse a dieta?